Carrizal

Carrizal





Dominado de forma casi total por el carrizo (Phragmites australis), se extiende rodeando las charcas y embalses, pudiendo desarrollarse tanto en las orillas secas como en el interior del agua hasta profundidades no superiores a los 50 cm.

Las adaptaciones al medio del carrizo, como puede ser el hecho de ser capaz de enraizar en el agua o los tallos duros aunque flexibles para evitar el derribo por el viento, hacen que sea una especie de gran éxito capaz de cegar totalmente las charcas al proliferar excesivamente. Esto motiva que deba ser controlado periódicamente mediante podas o quemas reguladas.

Junto al carrizo, aparecen otras especies en menor cuantía como las Eneas (Typha angustifolia y T. latifolia) y los juncos (Juncus maritimus y J. acutus, Scirpus holoschoenus, etc.) desarrollándose únicamente en las orillas en zonas bien conservadas del Parque.

Asociado al carrizo, aparece una de las plantas más características de la zona, conocida como corregüela (Cynanchum acutum) que trepa por el carrizo para conseguir la luz solar.